Unos años atrás, a las PYMES, Comercios, Restaurantes… no les quedaba otra alternativa que utilizar cajas registradoras, las más antiguas compuestas en su totalidad por elementos mecánicos, para llevar a cabo la gestión diaria de cobros y control de dinero por caja, esto cambio con la aparición del TPV.

Actualmente, las cajas registradoras se están quedando obsoletas con la aparición del ordenador TPV ó Terminal Punto de Venta, con todas las ventajas que esto supone para la gestión de la Empresa.

¿Qué es exactamente un TPV?

Un TPV es un dispositivo que ayuda en la tarea de venta de un establecimiento comercial de venta al público y puede estar formado por varios elementos informáticos, los más usuales son: El Software ó programa de gestión, cajón portamonedas, impresora de tickets (Térmica o Matricial), lector de códigos de barras y el ordenador con la pantalla (táctil ó no).

A continuación, mostramos las principales características de un TPV.

  • Control de Caja: Al disponer de un software de gestión, se agiliza muchísimo el proceso de cobros por caja diario ó transacción, simplificando el cierre del día de una forma más rápida y efectiva.
  • Control de Almacén: El sofware de TPV suele incluir también un sistema de control de almacén e inventario, lo que permite saber el stock disponible al momento y realizar pedidos antes de que se agote un producto determinado, así como realizar un seguimiento sobre qué productos están teniendo mayor acogida por los clientes y la rentabilidad de dichos productos.
  • Buscar transacciones: A través del programa de gestión se puede buscar fácilmente que se vendió, por ejemplo, el miércoles pasado y consultar un ticket determinado para realizar una devolución ó consulta sobre él.
  • Control y Seguridad: El TPV, en sí mismo, nos permite  conocer en cualquier momento lo que esté pasando en su negocio sin necesidad de estar físicamente en él, a través, del programa de gestión que posee.
  • Rapidez: Los empleados poseen una herramienta que le permite trabajar de una forma más segura a la hora de cobrar por caja y rápida a la hora de realizar una nueva venta. Los informes necesarios para la gestión del negocio se disponen al momento y con una presentación de la información más clara.

En definitiva, un TPV es una herramienta imprescindible a nivel organizativo y efectivo ya que es una fuente de información fiable, así que nos permite un ahorro de tiempo realmente importante a la hora de que el personal tenga que realizar una venta.

Tipos de TPVs

Básicamente los podemos clasificar en dos tipos, sin haber grandes variaciones respecto a su uso:

TPV táctil

Imagen obtenida de emaze.com

–  Compacto: Ocupa poco espacio y muy conocido en el sector de la hostelería y alimentación, destaca por su estética y pensados como punto de venta. Lleva todo integrado en una carcasa y en algunos modelos incluso la impresora de tickets, aunque se le puede conectar externamento otros dispositivos como un teclado, ratón..

–  Modular: Es el ejemplo clásico de un PC normal al cual se le instala todo el hardware y software necesario para su funcionamiento como un TPV. Suelen ser equipos más económicos que los compactos por su facilidad a la hora de escoger lo que se le conecta.

 

 

 

A continuación adjuntamos enlace para que veáis algunos modelos de TPVs Compactos y periféricos que se pueden conectar tanto a los Compactos cómo a los equipos Modulares.

http://www.jovinet.es/categoria-producto/tpv/